jueves, 3 de septiembre de 2015

SPINOZA, LOCKE Y HUME.

Spinoza era heterodoxo, por eso fue rechazado por sus amigos, incluso por su familia. Él estaba en desacuerdo con la doctrina católica, con la Biblia. Para Spinoza Dios es el mundo, no es independiente de él. Spinoza decía que la vida del hombre está condicionada por las leyes de la naturaleza. Así como Descartes distinguía entre mundo y alma, Spinoza no admitía esa distinción. No era dualista, era monista; decía que todo proviene de una sola sustancia. Él a veces lo llamaba “Dios” o “naturaleza”. Para él, el mundo y el alma son dos cualidades de aparición de Dios, “atributos de Dios”. Por tanto, las cualidades que conocemos de Dios son: mundo y alma. Todo lo que encontramos en la naturaleza es mundo o alma. Dios dirige el mundo mediante las leyes de la naturaleza.
Según Spinoza, la ambición y el deseo nos impiden lograr la verdadera felicidad y armonía.

Para Locke, la conciencia se encuentra al nacer tan vacía como un pizarrón en blanco que empieza de inmediato a llenarse de información. Distingue entre sentir y reflexionar y subraya que la conciencia no siempre es un receptor pasivo, sino que ordena y distribuye las sensaciones que va asimilando. Las sensaciones en conjunto forman conceptos.

Según Hume, el ser humano tiene dos tipos de percepciones:
- impresiones: La inmediata percepción de las cosas.
- Ideas: recuerdo de la impresión.
Tanto impresiones como ideas pueden ser simples o compuestas.
Según Hume, existen otros conceptos denominados conceptos falsos que surgen cuando el ser humano compone dos experiencias diferentes que no estén unidas en la realidad, pero sí en nuestra imaginación. Por ejemplo, un ángel. Existen dos ideas unidad; la idea de hombre y la idea de alas; entonces surge el ángel (hombre con alas).
Bien, Hume intenta investigar cada concepto para saber si se trata de un concepto falso o no. Opina que Dios es un concepto falso porque es una idea que consta de inteligencia, sabiduría, bondad, etc. Tenemos una “idea compuesta” de Dios.
¡Ah! Hume era agnóstico. Y por último, según Hume nuestros sentimientos son los que deciden lo que hacen.

miércoles, 2 de septiembre de 2015

EL RENACIMIENTO, LA ÉPOCA BARROCA Y DESCARTES.

Renacimiento significa “nacer de nuevo”.
Los humanistas renacentistas consideraban al ser humano como algo grande y valioso. Dos grandes figuras del Renacimiento fueron Ficino y Pico della Mirándola.
En la Edad Media el punto de partida era Dios. En el Renacimiento el punto de partida es el hombre.
Podemos hablar de un “nuevo método” que era investigar la naturaleza con los sentidos y experimento. Se denomina “método empírico”.
Ahora los seres humanos ya comienzan a utilizar, aprovechar y dominar la naturaleza. Por supuesto, se hizo el bien y se hizo el mal: hubo mejoras, enriquecimientos, pero también hubo paro, empobrecimientos, enfermedades, contaminación...
El Renacimiento dio lugar a una “nueva relación con Dios”. A partir del Renacimiento, la Biblia no sólo la leen frailes y sacerdotes (ya que estaba en latín) porque se traduce a lenguas vulgares. Lutero fue uno de los reformadores, tradujo la Biblia al alemán y se olvidó se muchas costumbres religiosas de la Edad Media. Lutero pensaba que no hacía falta pasar por la Iglesia para obtener el perdón de Dios. Decía que los hombres reciben la salvación mediante la fe.

Los conflictos entre madre e hija aumentan. Sin embargo, la madre se reconcilia con Sofía y juntas planean su próximo cumpleaños. Las postales de Hilde siguen llegando a casa de Sofía, en todas, se menciona el cumpleaños numero 15 próximo a celebrarse. Un nuevo encuentro con Alberto Konx reanuda el curso.
El Barroco aparece en el siglo XVII, época de guerras y grandes contrastes. En el aspecto filosófico, Se refuerza el materialismo punto contrario delidealismo es decir, el supuesto de que la base de la existencia era de tipo espiritual.

Descartes era racionalista. Decía que sólo podemos fiarnos de la razón, nunca de los sentidos.
Muchos filósofos llegaron a un escepticismo, pero Descartes no. ¿Cómo? Él comenzó por dudar de todo. No podemos estar seguros de nada. Un genio maligno nos engaña, tampoco podemos fiarnos de nuestros sentidos. Aquí es cuando cae en el escepticismo, pero, ¿Cómo logra salir de él? No está seguro de nada, pero de algo sí: de que duda. Luego, si duda es que piensa, luego existe. “Pienso, luego existo”. Él dice que está seguro de que existe como conciencia, pero no está seguro de que exista como cuerpo.
Para Descartes la verdadera realidad, la verdadera sustancia es Dios, es evidente que hay un Dios. Todos tenemos la imagen de Dios. También hay otras sustancias, el alma y el mundo como totalidad. Las dos sustancias últimas provienen de Dios porque Dios es el único que existe independiente de todo.
Descartes distinguía entre “res extense” y “res cogitans”, es decir, lo exterior a nosotros y lo interior a nosotros. Para él, el hombre es el único ser con alma y los animales pertenecen a la “res extensa”.

CREDO, POST SCRIPTUM Y LA EDAD MEDIA

A Pablo se le plantea una importante cuestión -¿los que nos son judíos pueden ser cristianos sin pasar antes por el judaísmo?- Él pensaba que sí, porque el cristianismo dirige a los hombres un mensaje universal de salvación.
Para la iglesia cristiana era importante aclarar en qué consistia su doctrina. Y para ellos se hicieron los “Credos” (resumen de los dogmas cristianos más importantes). Uno de esos dogmas era : Jesús es Dios y hombre, no solamente es “Hijo de Dios” sino que es Dios mismos y un “verdadero hombre”.
El mensaje de la iglesia es que Dios se convirtió en hombre (no era un “semidios” medio humano, medio divino) es “un Dios perfecto y un hombre perfecto”.

Querida Sofía: estamos a punto de salir de la Antigüedad, por delante tenemos la Edad Media cristiana, que también duró unos 1000 años. Hago lo posible para que te des cuenta de tus raíces históricas, sólo así serás un ser humano, algo más que un mono, así evitarás flotar en el vacío.

Para estos filósofos, el cristianismo era lo verdadero. Veamos los dos filósofos más importantes de esta época. Empezamos por San Agustín. Este filósofo, antes de ser cristiano, pasó por muchas otras religiones y corrientes, el estoicismo y el neoplatonismo.
San Agustín no vio distinción entre la filosofía de Platón y el cristianismo; aunque este se consideraba totalmente cristiano. Según él, la teoría de las ideas de Platón se unía con el cristianismo. ¿Y las ideas eternas? San Agustín creía que antes de que Dios creara el mundo, las ideas existían en el pensamiento de Dios.
¿De dónde viene el mal? San Agustín decía que hacer el bien es obedecer a Dios y el mal aparece porque los hombres desobedecen a Dios. Este filósofo también decía que el hombre tiene cuerpo material, pero es además un ser espiritual, tiene alma. Opinaba que Dios salva a algunos hombres de la perdición y sobre los que se salvan ya está decidido de antemano.
Veamos a Tomas de Aquino. Este filósofo intentó unir la filosofía de Aristóteles y el cristianismo. Decía que con la ayuda de la razón, podíamos llegar a lo mismo que nos dice la Biblia. Él opinaba que había una serie de “verdades naturales”. Por ejemplo: para llegar a Dios hay dos caminos; a través de los sentidos y a través de la fe. No debemos apoyarnos exclusivamente en la razón o en la Biblia. Para algunas cosas no sólo vale la razón, sino hay que recurrir a la Biblia; pero Tomas pensaba que basándose en Aristóteles se podría comprobar la existencia de Dios.
Aristóteles tenía una escala. Él pensaba que era así:
Tomas tenía la misma visión sobre las mujeres que ARISTÓTELES. El hombre es superior físicamente. Para los cristianos y los judíos, Dios no sólo era hombre, sino que tenía un lado femenino denominado “Sophia”.